Proyecto de investigación

Proyecto de salvamento arqueológico Av. Azcapotzalco # 398, colonia Ángel Zimbrón, delegación Azcapotzalco, Ciudad de México [2019]

OBJETIVO GENERAL

Se realizarán las exploraciones de manera sistemática con el fin de recuperar los indicios de ocupaciones de las diferentes fases establecidas en el área; además de analizar los materiales para ser correlacionados para precisar el orden de los eventos que se llevaron a cabo en el lugar. Se propone realizar como mínimo 25 pozos de sondeo en todo el predio, dando prioridad a los lugares en donde se va a cimentar con los firmes de concreto y trabes. También se pondrá atención en el área planeada para colocar la cisterna. Los pozos se trazarán de acuerdo al Norte magnético con la ayuda de la brújula y GPS para tener una mejor precisión y basándonos en el nivel 0, que estará a 10 cm sobre el nivel de banqueta. Las unidades mínimas o pozos tendrán una dimensión de 2x2 m y se ubicarán de manera aleatoria por todo el predio para abarcar lo más posible el terreno. En el caso de hallar vestigios arquitectónicos, entierros con ofrendas, basureros o zonas de actividad, se realizarán excavaciones extensivas con el propósito de obtener un buen registro de los elementos mencionados y determinar el tipo de contexto. Se llevará a cabo el control por unidad de excavación, que incluirá la fotografía del inicio, proceso y culminación de la excavación. Los elementos recuperados se registrarán por medio de dibujos de planta a escala 1:20 y a 1:10; en caso de dibujar detalles de los elementos que así lo requieran o entierros, también sus cuatro perfiles. Se propone excavar a una profundidad mínima de 3.50 m y una máxima que dependerá del material cultural presente, o hasta la presencia del manto freático.

ANTECEDENTES

Durante la época prehispánica Azcapotzalco mantuvo ocupaciones desde el Preclásico hasta el Posclásico, aunque en ocasiones fue abandonado parcialmente. En el formativo (800 al 400 a.C.) se reporta la presencia en esta zona de haber pequeñas aldeas que, mediante el análisis de la cerámica, se determinó que desempeñaban funciones de producción de cerámica. Las fases o complejos cerámicos son Zacatenco y Ticomán. La distribución de las aldeas fue creciendo después del abandono de Cuicuilco tras la erupción del volcán del Xitle en el 250 d.C. En el Clásico, se reporta la presencia de asentamientos de origen teotihuacano en el barrio de San Miguel Amatla en Azcapotzalco. la ocupación corresponde a las fases Xolalpan y Metepec (450-750 d.C.). En la fase Xolalpan el crecimiento demográfico de Teotihuacán llegó a su máximo, según los estudios de Millón (Manzanilla, 2001). Dicho fenómeno, provocó la baja de la población rural a los alrededores. Después de la muerte de Tezozómoc, adquirió el poder del reino su hijo Maxtla (1427), sin embargo, la alianza entre las ciudades de Texcoco, Tenochtitlan y Tacuba, más conocida como la Triple Alianza triunfa al ser derrotado este último rey. Y este territorio se divide de la cabecera tepaneca en dos parcialidades que se nombraron Mexicapan conformado por 14 barrios de etnia mexica y Tepanecapan que se compone de 12 barrios de origen tepaneca, divididos por un camino que los conectaba con otros pueblos de gran importancia, y que para la etapa de la conquista sería un punto significativo en el establecimiento de la parroquia principal dedicada a los apóstoles San Felipe y Santiago de la orden de los Dominicos durante la mitad del siglo XVI. En el siglo XVIII, la situación es mejorable, ya que Azcapotzalco sigue siendo cabecera con curato, debido a la equilibrada economía de la Nueva España. No obstante, continuó siendo república de indios con su propio soberano que gobernaba tanto criollos como a mestizos. Para ese entonces la población indígena disminuye drásticamente a 3,000, es decir un total de 593 familias. Durante la etapa de Independencia, se sabe que fue en Azcapotzalco en donde se libró la última batalla en la ciudad de México por los ejércitos Realista y Trigarante, el 19 de agosto de 1821 (Alamán, 1986). Sobre la Av. Azcapotzalco se construyeron varias casas para la aristocracia porfirista, acción ordenada con motivo de la celebración del Centenario de la Independencia. La tarea es encomendada, por Don Porfirio Díaz, a su Secretario de Gobernación José Yves Limantour, experto arquitecto a construir varias casas con el estilo francés que estaba de moda en la época. Los primeros estudios sistemáticos en Azcapotzalco se realizaron en el siglo XX por el ilustre Manuel Gamio, a petición de Franz Boas quien tenía el cargo de Director de la Escuela Internacional de Arqueología y Etnología Americana, y que junto con Eduard Seler tenían el interés de conocer la secuencia cultural de la Cuenca de México (Matos, 2015). El trabajo de Gamio fue la primera exploración utilizando el método científico. La intervención fue realizada sobre un montículo que ubicado en San Miguel Amantla, en la cual se recuperó material del Formativo, de la época teotihuacana, así como material azteca, registrándolos por medio del método estratigráfico (Bernal, 1992). En los primeros 50 años del siglo XX, la investigación arqueológica en Azcapotzalco ha sido un punto de interés ante la problemática de la secuencia cultural que ha ocupado en la cuenca de México, pero esto no concluye aquí, ya que tras las modificaciones urbanas y proyectos de infraestructura que ha presentado Azcapotzalco, han sido numerosas Investigaciones de salvamentos y rescates arqueológicos que se han efectuado, sin embargo solo se mencionara, las que en particular se intervinieron cerca del predio de Av. Azcapotzalco 398. En el rescate arqueológico de Av. Azcapotzalco # 700, con base en los trabajos de construcción de un conjunto habitacional, la arqueóloga María de Jesús Sánchez, recuperó un entierro Infantil y materiales de origen prehispánico. En el rescate arqueológico de la calle Libertad # 31, durante la construcción de departamentos, el arqueólogo Carlos Noé Parra reportó la recuperación de materiales arqueológicos que corresponden a las etapas Coyotlatelco (Epiclásico) y Azteca III (Posclásico tardío). El rescate arqueológico de Av. Azcapotzalco # 402, a raíz de una construcción de una bodega, el arqueólogo José Manuel Guerrero Romero, recuperó restos de muros con materiales asociados de tipo teotihuacano IV, Tolteca, Azteca II y III; así como también cerámica vidriada y artefactos de obsidiana. El rescate arqueológico de Av. Azcapotzalco 378, tras los trabajos a realizar de unos departamentos, La arqueóloga Judith Padilla y Yedra, reporta evidencias de canales y retos de material cerámico de distintas épocas. El Rescate arqueológico de Av. Azcapotzalco 360, con el objeto de construcción de un edificio para departamentos, la arqueóloga Judith Padilla y Yedra, recuperó materiales revueltos de distintas épocas. Respecto al abastecimiento de agua en este barrio, se menciona la presencia de canales y pozos de agua que lo menciona la Arqueóloga Susana Lam (2015). Investigación que retoma la arqueóloga Georgina Ibarra, con la prospección arqueológica realizada en la calle de Centenario #457 se registró dos pozos de agua ubicados al oriente y poniente del predio; cada uno de los pozos presentó características diferentes. Otro tema que se ve reflejado en su trabajo, es sobre la recuperación de materiales cerámicos foráneos, ya que identifica cerámica de procedencia otomí, huasteca, Meztitlán, Cholula y Atlacomulco. De igual manera, la arqueóloga Lucia Payá Pérez (en Av. Azcapotzalco no. 555) y la arqueóloga María del Carmen Lechuga García (en la calle Invierno no. 17 en la col. Ángel Zimbrón) también identificaron un contexto similar.

DESCRIPCIÓN

El predio a intervenir se encuentra sobre la Av. Azcapotzalco con el número 398 entre las calles Camino a Nextengo, Aquiles Elorduy y Centenario. La propuesta aquí presentada, se sustenta en el marco del proyecto de construcción de tipo habitacional que contara con 49 viviendas. Este predio es de forma rectangular, tiene un área de 2,429.84 m2. El edificio contará con tres niveles con un total de 1868.16 m2. Que, según las características del subsuelo, se busca la estabilidad de carga de los departamentos a construir. Para ello se planea realizar una excavación de 4.80 m de profundidad que considera la cimentación. Así como la construcción de un semisótano para estacionamiento y un área de cisterna.

IMPACTO

La renuencia de los vecinos a la realización de nuevas obras debido al impacto que estas causas en los servicios de agua, luz, y estacionamiento, entre otros

NOTAS

  1. Descripción de actividades: Exploración de 25 pozos de sondeo con posibilidad de realizar excavaciones extensivas, análisis de materiales (cerámica, lítica, hueso, metal, vidrio, etc.) e integración del informe técnico final.
Folio SIP
24392
Fecha de inicio
2019-04-15
Fecha de término
2019-09-14

TITULAR DEL PROYECTO

PARTICIPANTES

Colaborador (ctb): Cecilia Susana Lam García, Colaborador (ctb): Isaac Ramírez Rizo, Colaborador (ctb): María Fernanda Hernández Arvizu