El deterioro de los bienes culturales, así como los procedimientos de conservación y restauración de los mismos, implican tener en cuenta la comprensión de las propiedades fisicoquímicas de los materiales que los constituyen. La interacción del entorno, los materiales de restauración y los mismos elementos constitutivos del objeto, involucran una serie de cambios en todos los niveles de la materia (molecular, microscópico y visual). Las cuales determinan la permanencia y estabilidad del conjunto. Con base en lo anterior, los estudios fisicoquímicos de los compuestos que conforman un bien cultural, en relación a su disposición estratigráfica y el sistema de yuxtaposición como técnica específica de manufactura. La información metodológicamente obtenida y bajo el rigor científico, permite predecir los factores de susceptibilidad del objeto al cambio a través del tiempo, así como la afinidad de los nuevos compuestos aplicativos en orden a establecer un nuevo sistema estable posterior a su restauración. La disciplina de la restauración se caracteriza por buscar a través de la experiencia y los avances tecnológicos y de conocimiento sobre los materiales, los procedimientos idóneos para una labor de conservación óptima de los bienes culturales. Bajo este esquema, el presente proyecto ha generado lineamientos formales en el reconocimiento de operaciones de restauración basadas en metodologías científicas y fundamentación teórica.