Desde 2004 he trabajado el tema del Comportamiento humano en espacios arquitectónicos cotidianos y no cotidianos; esta línea de investigación me permitió analizar las respuestas comportamentales de los usuarios de un museo, en departamentos, en viviendas-taller, solo por dar algunos ejemplos. En esta nueva etapa de investigación amplío aún más el análisis de las respuestas comportamentales de las personas observadas. Para esto, he incursionado en otras corrientes teóricas que abordan y analizan el cuerpo humano, no desde una perspectiva anatómica, sino desde la corporeidad. En este sentido el cuerpo, la forma en que nos movemos y estimulamos, nos vestimos, percibimos al otro o respondemos hacia el entorno, adquieren un significado ordenado, transmitido, aceptado y reproducido culturalmente.