Un proyecto como el presente surge a partir del interés que se tiene por obtener nuevos datos e información sobre los primeros individuos que incursionaron en nuestro continente, ello con el propósito de aportar nuevos conocimientos sobre los pobladores tempranos en México. Entre las herramientas que pueden ayudar a despejar una serie de preguntas, se encuentran los avances tecnológicos y metodológicos que se han desarrollado en las últimas décadas en las ciencias antropológicas, bioquímicas, biológicas y genómicas, entre muchas otras especialidades. Estas tecnologías aplicadas a estudios de esqueletos humanos del periodo precerámico o de finales del pleistoceno, permiten recuperar la información relacionada con la genética, la alimentación y la antigüedad de los individuos estudiados, entre otros datos. La adecuada conjugación de estos resultados permite conocer con mayor amplitud las características biológicas y culturales de estos individuos que fueron los primeros en llegar y continuar su desarrollo en el centro del territorio de lo que hoy es México. Geográficamente, México ocupa un papel determinante para entender los procesos de migración de los primeros grupos humanos al continente americano, por esta razón es importante emprender el estudio de los esqueletos humanos más antiguos que permitan reconstruir y entender los cambios biológicos y culturales, de este periodo cronológico, pues con ello se obtendrán nuevos elementos para hacer propuestas en relación con las teorías e hipótesis que se han planteado sobre el origen, migración, antigüedad y filiación poblacional de los primeros grupos humanos en América, así como con su modo de y estilo de vida. Inscrita en esta última vertiente, la presente investigación consiste en efectuar una valoración de los cuadros patológicos dentales y sus efectos en la salud de una serie de 50 individuos que forman parte de la colección de restos óseos precerámicos de México, los cuales se encuentran bajo la custodia y protección de la Dirección de Antropología Física del INAH. Con dicho propósito de utilizarán conceptos y metodologías provenientes de la odontología, vistos desde el ángulo de la antropología física, para auxiliarnos en la identificación, clasificación, medición y análisis de los problemas orales notados en los individuos objeto de este estudio. Los ejemplares proceden de diversos sitios del centro del territorio nacional. Una de sus características reside en su antigüedad, misma que va desde los 12,700-5,400 años a.P. Por este motivo, se seleccionaron para conocer algunos de los padecimientos dentales que estos individuos sufrieron en vida, ya que se detectaron cuadros clínicos bucales que van de lo ligero hasta lo severo; la evidencia que se presenta en estos cráneos y que está presente en casi en todas las piezas dentales se ha confrontado con la hipótesis que desde épocas muy antiguas los humanos han tenido la costumbre de utilizar la dentadura como una herramienta de trabajo para elaborar objetos de piel o cuero de animal, así como de distintas fibras vegetales. Otro factor importante en la contribución se enfoca en que es posible que parte del desgaste que presentan las piezas dentarias en la superficie masticatoria haya sido provocado por productos alimenticios que formaron parte de su dieta.