Una de las labores sustantivas de este proyecto es el análisis de las colecciones existentes en el centro INAH Colima, las cuales se han incrementado de 87 colecciones óseas existentes en 2010 a 125 colecciones de restos óseos a finales del 2019, lo que permite el conocimiento de la biología de las poblaciones humanas que habitaron el Colima pretérito, como eran, de que se enfermaban, cuales eran sus costumbres funerarias y culturales, etc. Así mismo se planteó la necesidad de participar en los rescates arqueológicos en los que se recuperen entierros humanos con el fin de conocer más acerca de las costumbres funerarias que se desarrollaban en esta área, participando hasta el momento en al menos nueve de ellos. Otra labor no menos importante llevada a acabo por este proyecto es la continua actualización de la base de datos de las colecciones óseas, cuantas son, que cantidad de entierros contienen cada uno, con que tipo de informes cuenta y quien llevo a cabo el trabajo de exploración y/o análisis de los restos óseos y en que año, lo que permite no solo saber que tenemos, sino además proponer estrategias de resguardo para una mejor protección. En este año se propone llevar acabo el análisis de los restos recuperados por el arqueólogo Rafael Platas Ruiz, durante el salvamento arqueológico Los Limones y Parcela 145; así mismo se continuara con las investigaciones de los entierros del parque eco-arqueológico La Campana y se continuara con el registro de los entierros recuperados en Colima en el sistema de registro arqueológico del INAH. Dadas las condiciones de trabajo arqueológico en Colima y la continua recuperación de restos óseos, es de suma importancia contar con estrategias no solo de resguardo si no de análisis de entierros, con lo cual permite no solo la protección de estos materiales sino que incrementa la información biológica de la población que vivió en esta área del occidente.