Procesos de construcción nacional en México e Iberoamérica, siglos XIX y XX [2018]
OBJETIVO GENERAL
Contribuir al debate sobre el problema de las identidades colectivas, en la modernidad en general y en México e Iberoamérica en particular. Se puede afirmar que son los conflictos identitarios los únicos que la modernidad parece no haber encontrado una manera razonable de resolver, posiblemente porque los recursos y los derechos son negociables mientras que las identidades no. En este sentido un análisis sobre la forma en que se ha construido una identidad nacional en México e Iberoamérica puede aportar mucha luz sobre los retos de estas sociedades en un mundo postnacional. Desde una perspectiva ya más estrictamente historiográfica, parece ya llegado el momento de abandonar una visión teleológica de la historia, herencia en gran parte de la historiografía decimonónica, en la que la nación se erige en sujeto intemporal, cuando no único, de la historia y analizar ésta como un constructo histórico. Pero tampoco sirve la mera afirmación teórica, es necesario mostrar la forma en que ha sido construida en el tiempo.
ANTECEDENTES
A principios de la década de los ochenta del siglo pasado se produjo un giro radical en los estudios sobre la nación. En dos años, 1982 y 1983, se publicaron las tres obras básicas sobre las que se va a construir el nuevo paradigma en torno al concepto de nación, Imagined Communities de Anderson, Nationalism and the State de Breuilly y Nations and nationalism de Gellner. A éstas habría que añadir la muy temprana Social Preconditions of National Revival in Europe de Hroch, publicada en Praga en 1968, pero que apenas fue conocida hasta su edición inglesa de 1985 y que, como afirma Gellner, es todavía tanto una reconstrucción de la clase como de la nación. La idea hegemónica hasta ese momento, implícita o explícita, y de la que la obra de Khon, sin duda la gran autoridad sobre el hecho nacional durante la primera mitad del siglo XX, es un buen ejemplo, de las naciones como realidades objetivas, forjadas en una larga historia que se perdía en la noche de los tiempos, fue substituida por la de las naciones como comunidades imaginadas y de origen relativamente reciente. No eran ya las naciones las que, en un azaroso y prolongado proceso en el tiempo, conseguían un Estado, sino los Estados los que, en una relativamente rápida invención histórica, construían naciones a su medida. Para decirlo de forma simplificada los "modernistas" -aquellos que afirman el carácter moderno de la nación y la identidad nacional- desplazaron a los "primordialistas" aquellos que preconizan un carácter más o menos intemporal a la nación- como corriente de pensamiento hegemónica en las teorías sobre esa forma de identidad colectiva y legitimación del ejercicio del poder hegemónica en Occidente durante, al menos, los dos últimos siglo. Este giro epistemológico en las teorías políticas sobre la nación tiene, desde la perspectiva de la historia, consecuencias cuyo auténtico alcance apenas comenzamos a vislumbrar.
DESCRIPCIÓN
El marco teórico parte de la idea de la existencia de un modelo específicamente iberoamericano de construcción nacional por lo que se ha prestado especial atención a la búsqueda de estudios comparativos y la formación y/o participación en redes de investigadores que trabajen este tema en el área iberoamericana Este nuevo paradigma abre enormes posibilidades al plantearnos el reto de explicar como se construyeron las naciones, esas nuevas formas de identidad colectiva de la modernidad capaces de monopolizar la vida pública e incluso la privada de los habitantes del planeta durante, al menos, los dos últimos siglos. Tenemos una teoría, las naciones como comunidades imaginadas, pero nos falta el análisis concreto de cómo éstas han sido construidas en el imaginario colectivo de cada sociedad. El reto historiográfico es tanto reconstruir el proceso de construcción de las diferentes naciones como mostrar, desde un punto de vista práctico, que la idea de las naciones como una creación imaginaria no es sólo una elucubración teórica. Demostración esta última realmente necesaria, sobre todo si consideramos que uno de los argumentos implícitos de los primordialistas más radicales contra los modernistas es precisamente la falta de análisis históricos concretos, cuando no incluso la falta de formación histórica. Es la afirmación explícita de Hastings, quien afirma, refiriéndose a Breully, Gellner y Anderson, algo así como la trilogía sagrada de las teorías modernistas sobre la nación, que "los más modernos teóricos del nacionalismo parecen poco versados en historia pura y esa es la razón por la que, al hablar como historiador, considero que me enfrento principalmente a Hobsbawm". La construcción de las naciones sería, desde este punto de vista, uno de los grandes retos historiográficos del siglo que acaba de comenzar. No como discusión teórica sino como demostración práctica; no ya en el campo de la teoría política sino en el de la historia.
NOTAS
- Descripción de actividades: Durante el presente año se continuará la consulta de diversos acervos nacionales así como la publicación de varios artículos científicos, impartición de conferencias y participación en congresos nacionales e internacionales sobre el tema y se continuará trabajando en la redacción de un libro que se espera podrás ser publicado dentro de los próximos dos años.
- Vinculación del proyecto: Ampliación de la investigación a un proyecto de carácter internacional (Instituto Nacional de Antropología e Historia de México/Consejo Superior de Investigaciones Científicas de España) codirigido por mi y por el Dr. Francisco Colom, del CSIC.
Folio SIP
1850
Fecha de inicio
2011-01-10
Fecha de término
2019-01-19
Categoría
Unidad Administrativa
Área normativa
TITULAR DEL PROYECTO
PARTICIPANTES
Director de proyecto (pdr): Tomás Enrique Pérez VejoCOBERTURA
Ubicación geográfica