Proyecto de investigación

Poblaciones indígenas y dinámicas culturales contemporáneas en el oriente del bajío mexicano. Etapa III [2022]

OBJETIVO GENERAL

Registrar la composición y las dinámicas asociadas a la ritualidad en torno a los ancestros y la memoria colectiva que articulan a diversos poblados de la porción norte de la zona de estudio, principalmente en los municipios de Dolores Hidalgo y San Miguel de Allende, Guanajuato.

ANTECEDENTES

El Bajío es una zona del centro-occidente del país integrada por fracciones de los estados de Querétaro, Guanajuato y Michoacán. Esta región ha estado involucrada en procesos sociales, culturales, políticos y económicos de México; en el periodo virreinal las poblaciones nativas, fundamentalmente otomíes y chichimecas, fueron incorporadas social y económicamente a las haciendas y principales centros urbanos de la comarca, generando procesos de mestizaje agudizados durante los siglos XIX y XX con el desplazamiento de elementos culturales como la lengua materna y la identidad étnica. El universo de estudio es la porción oriental del Bajío, conformada por poblaciones mestizas e indígenas de los municipios de Dolores Hidalgo, San Miguel de Allende, Apaseo el alto, Apaseo el Grande y Comonfort (en Guanajuato), así como Santiago de Querétaro, Huimilpan y Villa Corregidora (en Querétaro). Algunos de estos poblados mantienen su componente indígena de filiación ñäñhö (otomí) evidente en manifestaciones como la gastronomía, la cosmovisión, los sistemas rituales, los paisajes, la historia oral, los conjuntos arquitectónicos religiosos y la construcción de una identidad indígena revitalizada durante los últimos 10 años. El presente proyecto es de continuidad, con número de folio 31358, cuyas actividades iniciaron en el año 2020, habiendo transcurrido a la fecha dos etapas desde su aprobación. Durante la Etapa I y II se concretaron todas las actividades y productos comprometidos, teniendo validados los 8 informes trimestrales de los años 2020 y 2021. Dentro de los logros destacan en 2020 la conformación de un estado del arte sobre estudios realizados en la región y la construcción de un perfil sociodemográfico y geoespacial de las comunidades indígenas que habitan la zona. Esto permitió elaborar una cartografía y una base de datos con información historiográfica, estadística y cartográfica de la región. En 2021 se integró un registro fotográfico de la zona, así como un corpus etnográfico mediante encuestas y entrevistas sobre aspectos generales de elementos articuladores regionales. Entre los retos identificados destaca el impulso de actividades específicas junto con la población abordada, para vincular los objetivos del proyecto con intereses locales de salvaguardia en torno a manifestaciones culturales específicas. Los pendientes por cubrir en la Etapa III del proyecto son la realización de trabajo de campo a partir de registros etnográficos que profundice la comprensión de la composición y dinámica de elementos articuladores de las poblaciones abordadas, específicamente la ritualidad asociada al culto de los ancestros y la memoria colectiva.

DESCRIPCIÓN

Lo anterior plantea un área de oportunidad para estudiar los componentes históricos, sociales y culturales de poblaciones del oriente del Bajío, zona asociada a un componente mestizo donde, sin embargo, es evidente la continuidad de manifestaciones culturales emparentadas a tradiciones indígenas otomíes de las regiones vecinas. El proyecto mantiene una metodología etnográfica respaldada por trabajo de campo para recuperar la historia oral de las poblaciones y analizar sus vínculaciones espaciales, comprendiendo diacrónicamente las dinámicas que articulan y definen la composición contemporánea del oriente del Bajío mexicano como región cultural. El proyecto tiene un enfoque regional, siendo útiles para analizar los datos etnográficos recabados los planteamientos de Pedro Tomé sobre la "región cultural", definida como ámbito donde las relaciones sociales se implican en el espacio para su constitución como paisajes y territorios, y donde ciertas relaciones se promueven o restringen en función de "redes" de intercambio del trabajo o de valores adscriptivos que permiten dicha vínculación socioespacial. Este autor considera fundamental comprender la "memoria histórica" de sus poblaciones, la cual promueve la conformación de "comunidades de sentimientos" que reinventan y gestionan las condiciones de los símbolos que otorgan identidad. También son útiles los planteamientos de Antonio García de León para estudiar los "imaginarios colectivos" de las formaciones socioespaciales. Esto se víncula con la idea de los actos de simbolización que ejercen las sociedades para apropiarse y dotar de sentido a "sus pasados" e identidades, marcando los signos distintivos de las regiones. Este autor asume que el estudio de las regiones debe conciliar la multidimensionalidad de las sociedades y los espacios, para identificar las "interferencias" de diversas dimensiones (económicas, religiosas, políticas, etc.), y las "conexiones" que posibilitan tales cruces. Por ello, un aspecto metodológico fundamental es identificar la producción y circulación de bienes de consumo que operan como escenarios impulsores de "vínculaciones relevantes" dentro de la composición sistémica de las regiones. Sin embargo, para acotar el marco de análisis es necesario recuperar la categoría de "memoria colectiva", entendida por Halbwachs como constructo emotivo y significativo que elaboran las sociedades para recordar ciertos acontecimientos que son relevantes a su constitución como agrupación cultural e histórica. Finalmente, en la Etapa III del proyecto se realizarán las siguientes actividades: diseño de instrumentos de investigación; búsqueda y comentarios de bibliografía; recorridos de área en la zona de estudio; registros etnográficos mediante observación directa y entrevistas semidirigidas; registros fotográficos; y un artículo científico.

IMPACTO

Académicamente, se pretende que el proyecto genere conocimientos antropológicos recientes, originales y pertinentes que contribuyan a consolidar una línea de investigación sobre región y grupos indígenas que habitan esta porción del país. En términos sociales, se espera que los conocimientos generados aporten a documentar y comprender la diversidad cultural, los poblados indígenas y la gestión de los patrimonios culturales en esta porción del país, construyendo estrategias ágiles para su consulta y manejo a través de repositorios institucionales, así como de medios de divulgación y difusión científica entre diferentes sectores sociales (investigadores especialistas, instancias gubernamentales y habitantes de las propias poblaciones abordadas).

NOTAS

  1. Descripción de actividades: Para esta etapa III del proyecto se plantea el desarrollo de las siguientes actividades: Diseño de instrumentos de investigación; búsqueda y análisis de bibliografía sobre la temática abordada; realización de recorridos de área en la zona de estudio; realización de registro fotográfico en la zona de estudio sobre aspectos relevantes a la investigación; realización de registro etnográfico (observación directa y entrevistas semidirigidas); y elaboración de un artículo científico.
  2. Vinculación del proyecto: En esta etapa del proyecto se busca fomentar y establecer vínculos colaborativos con el Centro INAH Querétaro para generar aportes académicos pertinentes a las labores sustantivas de dicho centro de trabajo en materia de gestión del patrimonio cultural. Además, se pretende establecer lazos colaborativos con instancias gubernamentales municipales y estatales de Guanajuato, para facilitar la socialización de los resultados parciales de la investigación desarrollada e impulsar sus usos potenciales en beneficio de la población y sus propios patrimonios culturales.