Es evidente que los bienes paleontológicos en México se han estudiado y resguardada por diversas universidades e institutos desde el siglo pasado y a pesar de todos los avances dentro del INAH, los estudios y protección de estos vienes se vieron mermados en el área de Paleontología, pues si bien en 1986 se facultó al INAH para ocuparse de la protección de éstos bienes. La obtención de información de este tipo de materiales (generalmente son elementos rotos o son solo fragmentos y rara vez son elementos completos), inicia a partir del hallazgo y recuperación en el sitio de excavación, por lo que mantener una excavación sistemática como la que se realiza en excavaciones arqueológicas permite conservar la posición que tienen los restos en relación a otros elementos (huesos, objetos u otras evidencias físicas naturales o antrópicas) que pueden denotar un contexto único. Así mismo, los trabajos curatoriales de una colección científica, permiten a los investigadores ya sea nacionales o extranjeros generar conocimiento a partir de los estudios realizados a los elementos que la conforman. Es por esto que la identificación de los elementos recuperados repercute directamente en la interpretación Paleontológica y los trabajos que pueden realizarse son Taxonómicos, Filogenéticos, Ecológicos, entre otros, para lo cual se hace uso de diferentes métodos y herramientas de otras disciplinas como la arqueología, la geología y la biología. IMPORTANTE: Este proyecto no tiene fecha de termino, debido a que el hallazgo de material paleontológico es permanente y la colección se incrementara acorde a los descubrimientos y materiales que se agreguen eventualmente.