Santo Domingo Tehuantepec es una localidad perteneciente a la región del Istmo de Tehuantepec, en el estado de Oaxaca; es cabecera del municipio que lleva el mismo nombre y que fue el segundo más afectado en el estado por los sismos de septiembre de 2017, el sismo principal con epicentro en el Golfo de Tehuantepec sucedido el 7 de septiembre y tras el sucedieron 23 mil replicas más que devastaron el territorio, entre las afectaciones se registran poco más de 4 mil 130 casas con pérdidas totales y parciales, parte de ellas ostentan en su arquitectura la identidad propia del entorno natural con que fueron construidas y adaptadas al clima cálido-tropical de la zona, son además el resultado ineludible de la producción y mejoramiento paulatino de las técnicas y procesos empleados desde la época prehispánica por la cultura principal, la zapoteca, así como por la influencia de los pueblos, mixes, huaves y chontales, arraigados en la zona.

A raíz de la devastación que dejaron los sismos, la Fundación Alfredo Harp Helú Oaxaca A. C., creo el Programa de Apoyo Inmediato a las Afectaciones por los Sismos de Septiembre de 2017 a Oaxaca, a través del cual brinda apoyo a las familias en la recuperación y restauración de dicha arquitectura de la artería central del conjunto urbano de Santo Domingo Tehuantepec, sede histórica de la región; en riesgo, ante la falta de programas específicos para conservar la arquitectura tradicional del lugar, pero principalmente por la amenaza al patrimonio arquitectónico tradicional y de casas catalogadas por el Instituto Nacional de Antropología e Historia como monumentos por su valor histórico, entre otros aspectos importantes como la falta de especialistas en el rescate y diagnóstico de las estructuras, medida que debía ser aplicada durante el registro de casas, por la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (instancia federal encargada de brindar apoyo a las familias afectadas), lo cual dio parte a la implementación de medidas de demolición de casas sin el soporte de especialistas .

Mediante el Programa se rescataron 20 casas de acuerdo a la arquitectura y tipología tradicional con la asesoría de especialistas multidisciplinarios en el tema, en el proceso se empleó un número importante de mano de obra proveniente de las localidades, contribuyendo así, en la generación de empleos en quienes se mantiene latente la recuperación de conocimiento de procesos y técnicas de restauración que se habían perdido o estaban en desuso, resultado de la enseñanza y capacitación de los mismos en la realización de dichos procesos. Actualmente casas de altas cubiertas de tejavana con morillos y biliguanas para proteger la casa del santo o el ‘Yoo Bidó’ en zapoteco que es la lengua materna, y el corredor de grandes columnas; los aleros de canecillos, los muros de adobe y los pisos de ladrillo se rescataron tanto como lo es de importante conservar el patio donde se plantaron árboles autóctonos en desaparición; desde la calle se perciben las mejoras en el entorno urbano como una invitación a sumarse en este proceder de conservar la arquitectura que caracteriza a Santo Domingo Tehuantepec, uno de los hitos de la ruta dominica y la tierra que Cortés halló en su afán de encontrar la Mar del Sur.