Santa Cecilia virgen y mártir, según el Martyrologium Hieronynianum, fue una noble romana, convertida al cristianismo y martirizada por su fe en una fecha no fácil de determinar, entre los años 180 y 230. La Iglesia católica y la Iglesia ortodoxa conmemoran su muerte el 22 de noviembre. Es patrona de la música, tanto de los músicos tradicionales, filarmónicos y populares como de los sinfónicos, académicos, organistas, cantores de iglesia, maestros de educación musical etc. A su nombre se han dedicado: calles, comunidades, pueblos, ciudades, gremios, cofradías, iglesias, parroquias, catedrales, escoletas, escuelas de música, conservatorios, salones de baile, nombres de grupos musicales y corales y composiciones musicales de diversos géneros. Ésta celebración es de carácter internacional y en México, cada, región cultural, región musical, institución académica, filarmónicos y melómanos, celebran de muy diversas formas el día del músico y, en la mayoría de los casos, tienen altares, imágenes, estatuas, además, procesiones, adornos de iglesias y altares, vísperas, mañanitas, representaciones pictóricas y teatrales, alabanzas, oraciones y misas, que en México y el mundo constituyen un inmenso patrimonio cultural material e inmaterial. El proyecto SANTA CECILIA EN LA TRADICION POPULAR, fue iniciado por la profesora-investigadora y fundadora de la fonoteca del INAH., maestra Irene Vázquez Valle, en el año 1995 aproximadamente. Con ella estuvieron colaborando Araceli Zúñiga Peña, Norberto Rodríguez Carrasco y en algunas ocasiones Felipe Flores Dorantes. El equipo de trabajo recopiló un considerable acervo de información documental que comprende: registro de festividades in situ, estampas, imágenes, fotografías, piezas musicales tradicionales de varios géneros y dotaciones instrumentales, grabaciones de campo, partituras, himnos religiosos dedicados a Santa Cecilia. Entrevistaron a músicos, organistas, directores de banda, entre otros, que expresaron sus opiniones sobre la biografía y forma de conmemorar esta celebración. La maestra Irene Vázquez Valle falleció el 4 de diciembre de 2001, su hija Renata González Vázquez, comunicó personalmente al profesor Felipe Flores Dorantes que por indicaciones de su mamá, él debía terminar y publicar ésta investigación.