Línea de investigación: Antropología física, salud y sociedad A finales del 2019 en la región de Wuhan, China, se presentó el brote de un virus SARS con una variante que se dominó SARS-CoV2, mismo que ocasiona la enfermedad COVID-19, que en una muy rápida expansión exponencial fue declarada como pandemia poco después. En México, para febrero del 2020 se dio el reporte del registro del primer caso y para el 20 de marzo se delinearon políticas públicas de salud, que incluyeron la suspensión de actividades educativas, de los gobiernos y económicas formales, con cierre de los espacios donde se llevaban a cabo; la recomendación del confinamiento domiciliario (quédate en casa); en el espacio público, el uso de cubrebocas, mantener la sana distancia (1.5 metros), el frecuente lavado de manos y el uso de gel anti bacterial (que se volvió obligatorio para entrar a los comercios y otras instalaciones). Todo ello para evitar aglomeraciones y reducir los contagios. Unas de las acciones que se solicitó (en México el seguimiento de las políticas públicas fue voluntario) fue el confinamiento, el que tuvo un gran impacto en la sociedad. Esto tuvo modificaciones profundas en las relaciones sociales y en la vida cotidiana de las personas. Además, enfrentar la enfermedad en lo familiar, en la vida escolar, en lo social, en las intuiciones de salud y en la sociedad, un gran reto para la sociedad y el mundo. En la ENAH, como en otras instituciones de educación superior, de un día para otro se suspendieron clases, con impactos diversos en la dinámica general de la institución y en los hogares. La cohorte de ingreso 2022-2 realizó todo el proceso de admisión en línea, modalidad en la que también cursó los dos primeros años de las licenciaturas. Es por lo anterior que, en 2023 se inició la aplicación de un cuestionario para recabar información sobre las experiencias familiares y educativas de las y los estudiantes del Cohorte 2020 durante el confinamiento obligatorio en el transcurso de la pandemia que ocasionó la enfermedad COVID-19.