El proyecto está enfocado en los últimos años al estudio del desarrollo urbano local que tuvo lugar a finales del periodo Preclásico y durante el Clásico temprano (ca. 200 a.C. a 400 d.C.) en la zona sureste de Puebla. Luego de las dos primeras temporadas, quedó en evidencia que el sitio tuvo fuertes relaciones políticas, ceremoniales y de estilo con Teotihuacán, en el centro de México, y muy posiblemente se trató de un centro político estratégico a partir del cual se organizaron las rutas de intercambio entre Teotihuacán y otras regiones más lejanas hacia el sur de Mesoamérica. En particular, en los últimos cinco años se ha enfocado al estudio de las unidades domésticas del sitio, su organización interna, su cultura material y sus relaciones con otras regiones. El estudio del abundante material cerámico y lítico, además de otros artefactos, es en estos años el medio para replantear las relaciones de este importante centro del sur de Puebla. A través del análisis de la cerámica y los espacios y monumentos registrados se elaboran reportes, comunicaciones académicas, inventarios, tesis, cursos y publicaciones, con el fin de dar a conocer la complejidad de este centro urbano del Clásico hasta ahora desconocido.