Durante el año 2002 el proyecto obtuvo un raquítico presupuesto, por lo que se continuó con la tarea propuesta en el año 2000, el de retrabajar los informes de campo para su eventual publicación. Además de continuar revisando material óseo con modificaciones culturales en las colecciones óseas producto de rescates y salvamentos de la Dirección de Salvamento Arqueológico. Asimismo, se participo en eventos académicos y se propuso el objetivo primordial de conformar la colección osteológica contemporánea mexicana San Nicolás Tolentino que en su primera etapa contempla un total de 2000 individuos, 1000 hombres y 1000 mujeres de diversas edades, gracias a los acuerdos con las Delegaciones Políticas de Iztapalapa, Tlalpan y Miguel Hidalgo y sus Panteones Civiles de San Nicolás Tolentino, 20 de Noviembre y Dolores respectivamente, además de contar con el apoyo del Registro Civil, dado el alto interés por parte del alumnado de las Licenciaturas en Antropología Física y Arqueología de la ENAH de contar con una colección testigo con su respectiva información de campo y gabinete para llevar a cabo diversas investigaciones no solo en el campo de la osteología antropológica, sino también en el de la arqueología histórica. Sin embargo, el 30 de septiembre se dio fin a la comisión encomendada al Laboratorio de Osteología de la Licenciatura en Antropología Física de la ENAH, por lo que el proyecto y la colección se trasladaron a la Dirección de Antropología Física del INAH, en donde actualmente se labora con ciertas limitaciones de espacio principalmente. Por otra parte, por fin la Revolución le hizo justicia a uno de los miembros fundadores del Equipo de Bioarqueología, el Arqlgo. Martín Rojas Chávez obtuvo su base como profesor de investigación científica del INAH, en la curaduría de la Sala de los Orígenes del Museo Nacional de Antropología. De igual manera, Rosa María Flores obtuvo su grado de licenciatura en la Especialidad de Antropología Física, además se encuentran en proceso cuatro tesis de licenciatura con materiales óseos de la Colección San Nicolás Tolentino, con lo que se cumple con uno de los objetivos primordiales del proyecto, el de formar nuevos cuadros de investigadores. En el mes de febrero de 2005 se reinició la exhumación de restos óseos áridos del panteón San Nicolás Tolentino de la Delegación Iztapalapa, para continuar con la conformación de esta colección testigo de población mexicana actual, ya que el objetivo primordial de ésta es completar un total de 2000 individuos de ambos sexos y de todas las edades (actualmente sólo se cuenta con 100 de ellos). En el año 2006, dadas las condiciones adversas que predominan en la osteoteca de la Dirección de Antropología Física, las labores de exhumación, limpieza, restauración y análisis de restos óseos áridos de cronología contemporánea, se han visto detenidos por el momento. Sin embargo se le dio prioridad a la publicación del catálogo de los primeros 100 individuos que conforman actualmente esta colección. Año 2007, se han realizado los trámites correspondientes con las autoridades del Panteón Civil de Iztapalapa (San Nicolás Tolentino), para reiniciar las exhumaciones de restos óseos áridos de temporalidad mínima. Dichas exhumaciones se tienen programadas para el mes de agosto del presente año, para seguir conformando la Colección referida, con la participación de alumnos de las licenciaturas de arqueología y antropología física de la Escuela Nacional de Antropología e Historia. Asimismo se cuenta con la colaboración del Centro Interdisciplinario de Ciencias de la Salud, Unidad Santo Tomás del Instituto Politécnico Nacional, para seguir estudiando la colección en diversos temas.