La zona arqueológica del Vallecito es la más norteña abierta al público por el INAH, y la única oficialmente abierta en el estado de baja california. Pese a recibir miles de visitantes anualmente, no se contaba hasta el presente proyecto con uno en el que se conjugaran de manera integral el registro total oficial de todas las manifestaciones gráfico rupestres, abrigos rocosos con ocupación doméstica, campamentos temporales, talleres líticos, hornos agaveros, etcétera. Aunque la zona arqueológica había sido anteriormente estudiada por nacionales y extranjeros, no se había contado con un proyecto de continuidad como el presente que permita un cabal entendimiento de los vestigios que ahí se encuentran, lo que repercute positivamente en su conocimiento y protección.