La relevancia del proyecto radica en ampliar el conocimiento que se tiene sobre las prácticas culturales originales concernientes al manejo de los restos humanos antes y después de ser inhumados. Hasta este momento no se han realizado estudios muy detallados que vinculen el tratamiento funerario con las alteraciones corporales de diversos tipos, valiéndose para ello de colecciones de osamentas pertenecientes a los antiguos pobladores aldeanos que habitaron el Altiplano Central durante el Formativo, y recurriendo a la vez al estudio tecnológico prehispánico a partir de los instrumentos arqueológicos de lítica y hueso disponibles. El acervo de la Cultura Tlatilco resulta ser tan vasto en cantidad de individuos y tan heterogéneo cultural y biológicamente hablando que resulta idóneo para realizar este tipo de análisis. Previa consulta bibliográfica, las actividades comprenden una primera inspección del material óseo realizado por la antropóloga física colaboradora, dentro del cual se busca identificar posibles huellas antrópicas como son huellas de corte, marcas en áreas articulares, presencia/ausencia de vértebras, entre otros, y en caso de obtenerse vestigios en los huesos de prácticas relativas al tratamiento mortuorio (y ritual), entonces se llevará a cabo la realización de arqueología experimental donde se intentarán replicar las herramientas utilizadas por los tlatilquenses para seccionar/mutilar el cuerpo humano y con ello estudiar por experimentación directa y el análisis microscópico las huellas de uso producidas tanto en el hueso como en el utillaje. Toda esta actividad dará como resultado un informe técnico final. El tiempo precisado para la realización del análisis en gabinete es de dos meses -tiempo en el que está previsto ejercer el recurso financiero- ocupando noviembre y diciembre en su totalidad, mientras que la elaboración y conclusión del informe final está programado para tenerlo listo en el primer trimestre del siguiente año (2023).