La investigación que propongo se deriva de la investigación "La diócesis de Michoacán en vísperas de la independencia. El clero parroquial visto a través de un informe de 1809" en la que exploré la composición de los párrocos del obispado a través de una serie de informes que dan luces sobre sus edades, tipo de ordenación, actividades desarrolladas, medios de subsistencia, salud, colocación geográfica, disciplina y comportamiento. En el último período me pareció particularmente interesante este último aspecto, pues estaba directamente relacionado con la promoción del clero y su desenvolvimiento en las parroquias al interior del obispado. Al explorarlo con detenimiento me di cuenta que era un asunto que tenía que ser estudiado con un proyecto específico por la cantidad de información y por las aristas que se podían desprender de él. Ciertamente el obispado ha sido ampliamente estudiado, sobre todo a partir de la gestión episcopal como horizonte de explicación (las gestiones de Pedro Anselmo Sánchez de Tagle, fray Antonio de San Miguel, Manuel Abad y Queipo) sin embargo creo que es importante vincular a los jerarcas de la iglesia y al clero parroquial para situarlos en su papel dentro de la sociedad.