Folio ejercicio anterior 15377. En 2018 inició el estudio sobre la vida y obra de Antonio de Torres. Se eligió a este artista porque es uno de los pintores menos conocidos de los que firman obras de caballete de Acolman. No existe ninguna publicación con el registro de sus pinturas en distintos países, sino solo de manera parcial en México o España; a pesar de que posee una vasta obra en territorio mexicano, específicamente en el centro y norte del país. Aunado a que Torres ha sido motivo de posiciones encontradas de especialistas como Manuel Toussaint y Francisco de la Maza, al clasificarlo el primero dentro del grupo de los llamados pintores secundarios y el segundo como uno los mejores pintores barrocos novohispanos. Se logró la recopilación de datos sobre ejemplares del artista existentes en distintos recintos religiosos, museísticos y acervos particulares, en territorios de México y de otros países, y con los datos recabados se elaboró una base con los registros. También se obtuvieron datos la vida del autor, su dinámica productiva y la evolución de su propio estilo artístico. El proyecto alcanzó las metas y cumplió con los objetivos programados en 2018. En 2019 el proyecto tuvo continuidad, corroborando personalmente la existencia de su obra en distintas partes de México. El producto final fue el borrador de un libro cuyo título es Vida y obra del pintor novohispano Antonio de Torres (siglo XVIII). Se entregó el mencionado producto y se llegó a dos conclusiones. Primera, no existe hasta ahora un documento tan completo como el que generó este estudio y, segunda, aún falta corroborar la existencia y estado de muchas de las obras registradas en literatura que no se pudieron ver por distintas causas. En el caso de Jalisco, Hidalgo y Aguascalientes no se pudo ir por motivos de tiempo y económicos (fondos institucionales insuficientes), y en SLP, donde se encuentra la colección más numerosa del pintor, no se pudo tener acceso para comprobar su existencia en el lugar registrado por otros autores, debido a la negativa de la orden franciscana, bajo la cual se encuentran en resguardo las obras. Por ello el año 2020 se consideró oportuno para continuar con el registro nacional, avanzando en los estados de SLP y Jalisco. Sin embargo, las condiciones de la pandemia, el confinamiento, la falta de recursos para el desarrollo de proyectos y los cambios en la forma de laborar, no permitieron proponer dichas tareas. Se replanteó entonces, de mediados de agosto a diciembre, avanzar en el proyecto realizando una nueva revisión de la información recabada a lo largo del desarrollo del proyecto, así como ordenar las fotografías tomadas en todas las entidades visitadas y realizar una nueva redacción del texto que pretende concluir en un libro científico.